lunes, 29 de octubre de 2007

"Cantos de soleá"



Esa calle no sabría
decir lo que le faltaba
entre la noche y el día.

Pero era la misma calle
por que pasaron tus ojos
para coronar la tarde.

Y fue el sol, más sol entonces,
una arenga luminosa
a los portales sin nombre.

Y más acera, su acera;
y más balcón, sus balcones;
y ella, más ser la que era…

¡Esa calle oscurecida
que no sabe qué le falta
entre la noche y el día!


(octubre, 2007)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Qué placer pasear por esta calle!

Antonio Azuaga dijo...

Gracias, Julio; ¡siempre tan leal!