lunes, 4 de junio de 2007

Veinte años de más

(Sigamos con las simetrías. La "Primera estación" acabó con un poema en endecasílabos; empiece pues la "Segunda" con otro en alejandrinos)

Puedo pensar veinte años atrás y parecerme
que apenas sucedieron. Puedo recolocarlos,
verlos uno tras otro, como un álbum del alma,
en fracciones pequeñas de la vida. No puedo,
sin embargo, pensar veinte años por delante,
veinte años decadentes, de más, de sobresueldo;
veinte años decididos a ser inadvertencia
y cuesta acrecentada en olvidos y cansancio.

No puedo imaginar veinte años de domingos
sin sueños que aguardar ni plazos de esperanza.
O quiero no poder. Tan no poderlo quiero
que hasta vivir me advierte que no debo vivir
más de la cuenta habida. O quizá un poco más
aún para saldar ciertas penas pendientes
que quedaron trabadas en días luminosos,
ciertas lágrimas de ésas que te siembran el cáncer
de una deuda en los sueños, ciertas ruinas guardadas
en solares del alma. Seguir un poco más…
y bendecir los días que he llegado a vivir
entre aquéllos que amé y aquéllos que me amaron,
pedir perdón si acaso dañé a quien no quisiera
y oír un poco más gritar a los vencejos
en los rojos crepúsculos de un último verano.

Y será suficiente. Y será innecesario
que la tarde se alargue después de atardecida.


(junio 2007)

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo decía no puede ser, por Dios, no puede ser que la adicción nos haya atrapado sólo a los demás. Veo que no, y que te descuelgas con estos alejandrinos espléndidos y amargos, sin asomo de contradicción. Besos agradecidos.

Antonio Azuaga dijo...

¡Cómo eres! Besos agradecidos a ti, naturalmente.

Anónimo dijo...

¡Qué bien ,Antonio! En un minuto de soledad y "paz" en nuestro despacho, harta de sinsabores, he tecleado tu página por si acaso y te he encontrado. Y de nuevo un placer...triste, intenso, pero tan bello y reconfortante!

Antonio Azuaga dijo...

Si de verdad te ha sido reconfortante, perdonaremos la vida a este poema. Gracias, Inma.

Máster en nubes dijo...

Buenas noches, Antonio. No es que me haya olvidado pasearme por aquí al atardecer, algo que se va a convertir en una costumbre agradabilísima, es que he estado trabajando hasta tarde.

Qué a gusto estoy aquí en tu junio, con la lluvia que cae en Oviedo.

Y aunque triste el poema, es precioso.

Entiendo que puede ser difícil pensar en veinte años por delante, pero por favor, -te vas a reir con esto, perdona- ¡no te mueras, Antonio!

Quiero decir a corto plazo, vamos, que no.

Que seguro que te quedan muchas risas y algunas sorpresas en la vida.

Y acabo de leer lo de tu padre y me he quedado pensando otra vez. Mi madre tiene 84 años. En fin.

Te mando un beso y un abrazo.

Y una pregunta porque creo que de esto tu sabes. ¿Te parece "recomendable" la obra de teatro de Flotats sobre Descartes y Pascal? He leído algo pero no me fío... y como pongan a Pascal como lelo me enfado.

Pero tú me dirás (si puedes).

Pues eso, que no pienses en morirte (por ahora, digo), hazme el favor ;-)

Aurora

Antonio Azuaga dijo...

Bueeeeno… Haré por no morirme.

Bromas aparte, gracias por la visita. Respecto a la pregunta, no te puedo decir si la obra es o no recomendable porque no conozco el texto de Brisville, aunque la combinación Descartes, Pascal y Flotats tiene la altura suficiente como para estar seguro de que no decepcionará, por mucho que se hiciera a Pascal ser más Pascal de lo que fue.

Besos.